Un poco de historia

Las máquinas tragamonedas (pagamonedas, slots en inglés o tragaperas en españa) son hoy día, un clásico en cualquier sala de juegos y Casinos, pero hace cien años atrás, y más también, la cosa no fue tan simple.

La primer máquina tragamonedas data de 1887 del siglo XIX, cuando el ingeniero alemán Charles August Fey ha emigrado a California. Cerca de diez años le ha costado de construir la primera máquina tragaperras y que llamó Campana de Libertad. La máquina era muy avanzada para su época. Tenía tres rodillos cilíndricos que tenían cuatro símbolos. También había un cajón para insertar el dinero en forma de monedas y una palanca manual con la que se activaba el mecanismo del juego. Desgraciadamente no se conocen datos exactos sobre cuánto ha sido el beneficio de usar la máquina. Según reportes de entonces, los jugadores recibían premios iguales que mostraban los símbolos dibujados en los rodillos, también bebidas y otro tipo de premios.

El Money Honey – la primera máquina tragamoneda electrónica

La primera máquina tragamoneda electrónica ha sido inventada en 1963 por la empresa Bally Tecnologies y la llamaron Money Honey. Este tipo de tragamonedas ha puesto las bases de las máquinasvirtuales de hoy. A pesar de que la palanca lateral ya era innecesaria, la han dejado porque la gente se había acostumbrado con ella. En aquella época se pagaba un premio máximo de 500 monedas pero su cantidad ha aumentado rápidamente.

Tragamonedas hoy

Durante toda su historia las tragamonedas nunca han cambiado mucho e incluso las tragamonedas online se parecen mucho a las antiguas máquinas mecánicas con varios rodillos. El premio era y sigue siendo aleatorio. Además, las reglas son las mismas: antes de jugar hay que ingresar una cantidad de dinero. En vez de la palanca ya se utiliza un botón que pone el mecanismo de los rodillos en rotación. Las imágenes en la pantalla muestran si se ha ganado un premio o no. Los símbolos diferentes forman otro nivel de ganancias.

Hoy los símbolos de premio son generados aleatoriamente por ordenadores. En casinos presenciales y bares, la mayoría de las máquinas también son automáticas y digitales. En Internet es todavía más fácil de encontrar un juego de tragaperra con símbolos que le gustan. En la pantalla de la computadora se muestran los diferentes juegos y se pueden seleccionar los juegos de slots con temática diferente.

Las tragamonedas online tienen el encanto especial de poder combinar las máquinas tradicionales con historias interactivas, escenas cortadas de películas famosas de cine, rondas de bonificaciones y mini-juegos. A menudo se puede seleccionar el botón “Riesgo” y doblar el premio con un mini juego o bien se puede perder la ganancia anterior en el giro adicional. Las probabilidades son de 50:50 y por lo tanto son bastante justas.

En fin, las tragamonedas proporcionan gran entretenimiento y diversión. Prometen ganancias reales. Los expertos dicen que a los slots hay que verlos como manera de divertirse y no para ganar dinero. El dinero que paga en una máquina slot es sólo para entretenimiento y así hay que vivirlo, como un momento para pasarla bien.